CORREO ELECTRONICO DE CONTACTO

jluisvs@educastur.org

lunes, 30 de octubre de 2017

MUJERES: ¿ME VOY A PONER GRANDE SI HAGO PESAS?

Las pesas, las mejores aliadas de las mujeres para cuidar su cuerpo
La gran mayoría de las mujeres tienen miedo a hacer pesas porque no quieren muscular y que se les ponga cuerpo “de hombre”. ¡Pero esto no va a suceder!

EN PRIMER LUGAR, ¿DE DÓNDE SURGE ESTE MIEDO? En general, en los gimnasios suele haber gran cantidad de hombres en la zona de máquinas y peso libre, por lo que una mujer puede sentirse incómoda en esa zona, y tira más hacia las clases colectivas, o las máquinas de ejercicio cardiovascular.
¿QUÉ ES TONIFICAR? Es básicamente un engaño, ya que realizar muchas repeticiones de un mismo ejercicio con muy poco o nada de peso supone un estímulo demasiado débil como para que el músculo se vuelva más fuerte.
¿POR QUÉ HAY QUE HACER PESAS Y NO SÓLO CARDIO SI LO QUE QUIERO ES PERDER GRASA? 
Al hacer pesas, lo que estamos haciendo es crear masa muscular. El músculo, necesita muchos más nutrientes (más alimento) que la grasa, por lo que nuestro cuerpo gastará más a lo largo del día simplemente para mantenerse. Por tanto, a mayor masa muscular mayor tasa metabólica basal (más quemamos estando en reposo), y por tanto quemaremos más grasa.

 

Ganar masa muscular es muy difícil, tanto para mujeres como para hombres. Requiere de mucho tiempo y esfuerzo, tanto en llevar los entrenamientos como la alimentación a rajatabla. Por tanto, el miedo a que esto suceda repentinamente, no es muy coherente.

 

El músculo necesita altas cargas (pesos) para aumentar su fuerza, para poder conseguir una ganancia de masa muscular real.

Además, las mujeres no estamos hechas para tener músculos grandes como los de los hombres, ya que tenemos muy poca testosterona. Cuando veis una mujer con músculos desproporcionados… ¡sospechad! Puede haber dos opciones: o lleva machacándose más de 10 años haciendo pesas con entrenamientos durísimos, pasando por etapas de volumen y definición bestiales, o ha hecho eso mismo y además ha utilizados sustancias ilegales.

Una mujer normal y corriente, que va al gimnasio entre 3 y 6 veces por semana, a hacer su rutina de pesas + cardio, aunque entrene con mucha intensidad, no se va a poner grande. Lo único que va a suceder es que va a dar forma a sus músculos, va a eliminar la flacidez y la celulitis, va a cambiar la grasa por músculo, pero sin ganar mucho volumen.

 El objetivo del ejercicio físico con pesas no es solamente aumentar los músculos, sino que tiene muchos otros beneficios. Siguiendo una rutina adaptada a la forma física y necesidades de cada mujer, será posible erradicar estos temores infundados y disfrutar de un cuerpo tonificado y sano gracias a las pesas.
Desde Zagros Sports apuntamos las principales razones por las que los ejercicios con pesas son beneficiosos para las mujeres.
1. Pérdida más efectiva de grasa: sí, el entrenamiento con pesas no es sólo para quienes quieren ganar más músculo en los brazos, sino que potencia la reducción de la grasa. De hecho, recurrir a las pesas ha demostrado una mayor efectividad en la pérdida de grasa corporal que el ejercicio cardiovascular. Esto es debido, en su mayor parte, a que nuestro cuerpo sigue quemando grasa después del ejercicio por la energía extra que necesita para su recuperación, lo que se traduce en un metabolismo más elevado.
Las pesas, las mejores aliadas de las mujeres para cuidar su cuerpo
Victoria's Secret
2. Aumento del gasto calórico: aunque el aumento de la masa muscular no esté entre los objetivos de todas las mujeres, supone un mayor consumo de calorías y, por lo tanto, un mayor aprovechamiento del ejercicio. Cuando los músculos aumentan su masa, cada contracción que estos produzcan requerirá una mayor energía. Por ejemplo, si dos mujeres andan a la misma velocidad, gastará más calorías la que mayor masa muscular tenga. Además, estudios del National Institute of Health de Estados Unidos sostienen que el incremento del gasto energético, incluso después de una ligera sesión de entrenamiento con pesas, afectaría favorablemente al balance energético y a la oxidación de grasa.
3. Moldeado de la figura: al perder grasa a la vez que aumenta la musculatura, es más fácil esculpir el cuerpo y moldear la figura para conseguir unas curvas mucho mejor formadas. Este efecto no se consigue solamente con ejercicio cardiovascular. El entrenamiento de fuerza permite crear curvas y mantener las existentes.
4. Fortalecimiento de los huesos: los entrenamientos de fuerza también evitan la pérdida de masa ósea, especialmente importante en las mujeres, quienes experimentan un descenso de la misma en los años de menopausia. Los datos de estudios de la Universidad de McMaster en Canadá han demostrado que se puede incrementar la densidad ósea de la columna vertebral de mujeres postmenopaúsicas hasta un 9% por medio de los entrenamientos de fuerza. Su práctica de forma periódica y continuada en el tiempo hará visibles los resultados.
5. Cuidado del corazónlevantar pesas es además una forma de cuidar el corazón y prevenir problemas cardiovasculares. Es una actividad muy recomendada para las personas en situación de riesgo cardiaco. Al mismo tiempo que sirve para reducir la presión arterial, permite disminuir el nivel de triglicéridos y azúcar en sangre. Con ello estaremos reduciendo y controlando algunos de los factores de riesgo que pueden desencadenar en patologías peligrosas para la salud.
6.Mejora de la calidad del sueño: diversos estudios han demostrado que los ejercicios de fuerza con pesas ayudan a mejorar la calidad del sueño. Se potencia un sueño más profundo y se descansa mejor, reduciendo el número de veces que nos despertamos a lo largo de la noche. Y el descanso es esencial para poder hacer frente a la rutina diaria y mantener el estado de salud. Tanto por dentro como por fuera.
7. Reducción del estrés: es una cualidad del ejercicio en general ya que la práctica de actividad física permite liberar presiones y estrés de forma diaria. Concretamente quienes practica ejercicios de fuerza demuestran menores reacciones adversas a las situaciones de estrés. Esto se debe a que la puesta en marcha de estos entrenamientos libera hormonas relacionadas con una mayor sensación de placer y bienestar.
8. Mejora las funciones cognitivas: para las mujeres con una avanzada edad, los ejercicios de fuerza con pesas mejoran la memoria y la capacidad cognitiva. Se previene así el desarrollo de enfermedades como el Alzheimer. Los ejercicios han de ser de una intensidad moderada para activar en el cerebro la liberación de las sustancias que lo mantienen activo y en forma. Se practica así ejercicio para el cuerpo y la mente.
La combinación de diferentes entrenamientos y ejercicios será la clave para alcanzar los objetivos marcados, obtener el cuerpo deseado y aumentar nuestra salud y calidad de vida incorporando las pesas a nuestra rutina de entrenamiento.

 

jueves, 5 de octubre de 2017

¿Crees que entrenas mucho? Estos monjes budistas recorren más de 38.000 kilómetros en 1.000 días

¿Serías capaz de recorrer 38.400 kilómetros en 1.000 días de entrenamiento? Estos monjes budistas del monte Hiei, en el nordeste de Kyoto (Japón), lo hacen. No es una tarea fácil: desde 1885 solamente 46 hombres han conseguido completar este camino ascético conocido como kaihōgyō (回峰行, literalmente "rodear la montaña") con el que se busca tanto el sacrificio del cuerpo como el entrenamiento de la mente y del espíritu.
Un poco menos que dar la vuelta al mundo siguiendo la línea del Ecuador: esa es la distancia que cubren estos monjes en un período de siete años en los que caminan entre 100 y 200 días seguidos cada año por la montaña hasta completar la distancia requerida. Este camino de meditación y de autoconocimiento es uno de los retos más duros que se conocen en el mundo: así es como lo hacen ellos.
En este precioso mini-documental, el director Ivan Olita captura la esencia de este reto en el que el esfuerzo físico, la conexión con la naturaleza y la meditación son las bases principales.
Para que nos hagamos una idea de la magnitud del kaihōgyō, os explicamos a continuación cómo dividen los monjes los kilómetros a lo largo de los siete años de duración de esta experiencia. Conviene no olvidar que, además de caminar más de 30 kilómetros diarios, siguen ocupándose de las labores del templo el tiempo restante del día.
  • Año 1: 30 kilómetros al día durante 100 días consecutivos 
  • Año 2: 30 kilómetros al día durante 100 días consecutivos 
  • Año 3: 30 kilómetros al día durante 100 días consecutivos 
  • Año 4: 30 kilómetros al día durante 200 días consecutivos 
  • Año 5: 30 kilómetros al día durante 200 días consecutivos 
  • Año 6: 60 kilómetros al día durante 100 días consecutivos 
  • Año 7: 84 kilómetros al día durante 100 días consecutivos y 30 kilómetros al día durante los 100 días siguientes
Tradicionalmente, el primer año de caminata era una especie de prueba que daba acceso al reto completo: aquellos que superaban el primer año y decidían continuar, debían hacerlo con todas las consecuencias, consiguiendo completar el kaihōgyō o perdiendo la vida en el intento.
En la actualidad existen dos tipos de kaihōgyō: el hyaku-nichi kaihōgyō, que dura solamente 100 días, y el sennichi kaihōgyō, la versión completa de 1000 días de duración.
Añadimos, además, que los monjes que realizan el kaihōgyō no cuentan con ninguna comodidad que pueda facilitar el viaje: frente a nosotros, que nos equipamos lo mejor que podemos cuando salimos a la montaña, ellos realizan su recorrido vistiendo warajiunas tradicionales sandalias de paja que eran el calzado tradicional japonés.
Un reto físico, mental y espiritual que aúna al monje con la montaña en su largo caminar.